By raquel fernandez
En el amplio mundo de los productos elaborados por las abejas y sus derivados, en nuestra tienda de miel online, además de poder comprar miel tradicional, nuestros clientes encontrarán muchos otros tipos de mieles, entre las que se encuentra la miel de encina. ¿Qué te parece conocer un poco más sobre esta miel tan peculiar y sus propiedades? ¡Quédate con nosotros, que te lo contamos todo!
¿Qué es la miel de encina?
A diferencia de la miel que las abejas elaboran al extraer el néctar de las flores, la miel de encina, miel de bosque o rocío de miel, se produce por aquellas abejas que beben la sustancia dulce y rica en carbohidratos que segregan los frutos de la encina, o bellotas. Es lo que se conoce como mielato.
Para elaborar esta miel, las abejas visitan los terrenos de montaña en los que habitualmente se encuentran las encinas y los robles que producen estos frutos, y a la vez la melaza. Estos insectos maravillosos después de recolectar la melaza dulce que producen otros insectos áfidos como los pulgones, la procesan y la transforman en mielato.
Pero esta miel no sólo se diferencia del resto por su método de extracción, la miel de encina tiene un color ámbar muy oscuro, casi negro, lo que hace que sea inconfundible. Además, al tratarse de una miel de árboles con esencias de resinas naturales, desprende un intenso aroma a malta.
En cuanto a su sabor, la miel que proviene del fruto de las encinas es menos dulce que el de la miel tradicional. De hecho, es también característico su sabor leñoso e intenso y su consistencia densa, que indudablemente recuerda al bosque del que proviene.
¿Cuándo se cosecha el mielato o miel de las encinas?
El mielato suele cosecharse a final de la temporada estival, ya que es en verano cuando hay una floración menor y una producción mayor de estas sustancias. Una vez que las abejas se esmeran en encontrar esta sustancia para cumplir con su producción anual, éstas pecorean la secreción de los árboles y la deposita en la celdilla. Después de sucesos trasiegos, la miel está madura (en su punto de humedad) y la abeja la sella.
Una vez que todo el panal se encuentra totalmente sellado, llega el momento en el que el apicultor se encarga de extraer la miel final con delicadeza y profesionalidad.
¿Cuáles son las propiedades de la miel de encina?
Como el resto de mieles, la miel que proviene del fruto de la encina tiene un gran valor medicinal. En este caso, las propiedades de esta miel para la salud se explican por su alto contenido en minerales, especialmente en hierro y en polifenoles. Esto hace que una de las grandes propiedades de la miel de encina sea su alto efecto antioxidante. De hecho, es su contenido el hierro el culpable de este color tan oscuro que la diferencia de las demás.
Por otro lado, es un tipo de miel más adecuada para todas aquellas personas que quieren reducir el consumo de azúcares y cuidar la línea. Ya que el índice glucémico de este producto es también menor que el de la miel tradicional.
Otras de sus propiedades basadas en su alto contenido de minerales son las digestivas y astringentes. Por ejemplo, se utiliza para luchar contra la disentería o la dierrea; en tratamientos para combatir la anemia, la metrorragia y las hemorragias nasales frecuentes; y las afecciones de las vías respiratorias. En este caso, la miel de encina puede funcionar en personas que padecen de trastornos respiratorios como el asma, la tos, la bronquitis o ronqueras.
Además, el contenido en minerales de esta miel la hacen ideal para consumirla en la etapa de desarrollo de los niños y para reponer energía en momentos de cansacio, debilidad y desgana.
